lunes, 25 de febrero de 2008

Felicidad...

Disfrutamos del calor porque hemos sentido el frío. Valoramos la luz, porque conocemos la oscuridad. Y comprendemos la felicidad porque hemos conocido la tristeza.

Lo más triste en este mundo es querer a alguien que antes te quería a ti.

El amor nunca se pierde. Aunque no sea recíproco, volverá para purificar y hacer tierno su corazón.